Mencionado por primera vez en las páginas de la revista Pirelli en diciembre de 1971, La Sequenza se realizó en 1981 para la gran retrospectiva en el Forte del Belvedere (Florencia). Tras la restauración en 1991 para una exposición en Villa Arconati en Bollate (Milán), en 2010 la escultura fue donada por la Fundación Fausto Melotti y colocada en la entrada del jardín exterior de Pirelli HangarBicocca, para acoger al visitante como umbral simbólico, momento de paso al arte contemporáneo a través del acervo cultural de un gran maestro del pasado reciente. La obra -una composición de módulos idénticos formada por tres niveles de profundidad según una alternancia de líneas, llenos y vacíos que hace imposible captarla con una sola mirada- representa la culminación de la investigación del artista, de una antimodernidad escultura - festiva y antimonumental. En La Secuencia es posible encontrar los temas queridos por Melotti: el espacio teatral que se puede recorrer en profundidad, dado por las distintas alas que se abren una tras otra; el concepto de modulación - elemento racional que surge del ritmo y estudio de las proporciones - frente al de modelado - elemento subjetivo e irracional propio de la escultura tradicional; la del tema y las variaciones -elemento musical por excelencia- que surge de la alternancia de volúmenes positivos y negativos; finalmente, el elemento arquitectónico dado por el tamaño de la escultura y el ritmo de las losas de Corten que aparecen casi como columnas de una construcción clásica o racionalista.