Palazzo Coronini Cronberg es una residencia histórica que data de finales del siglo XVI, hoy sede de la fundación del mismo nombre.

Recorriendo las quince salas que componen el itinerario del museo, incluida la sala donde murió Carlos X de Borbón , último rey de Francia, en 1836, el visitante es transportado mágicamente en el tiempo, gracias al ambiente cálido y sugerente del habitaciones con muebles de los siglos XVI y XVII en la planta baja, las suntuosas salas de estar del siglo XVIII, las habitaciones imperio y las habitaciones del siglo XIX en la planta principal.

Adornos, platería, porcelana, cristal, fotografías, retratos y objetos cotidianos recrean la atmósfera de una casa verdaderamente habitada, permitiendo que la presencia de los antiguos propietarios se perciba en cada estancia.

Entre recuerdos y reliquias familiares se pueden admirar obras de arte de extraordinario valor: pinturas de Alessandro Magnasco, Giambattista Langetti, Giuseppe Tominz, Rosalba Carriera y Elisabth Vigée Le Brun, esculturas de Bertel Thorvaldsen y Franz Xaver Messerschmidt.

El Palacio está rodeado por un espléndido parque inglés de cinco hectáreas, en el que se pueden descubrir importantes hallazgos arqueológicos de Aquileia, un elegante templo de estilo Liberty, plantas raras y preciosas: fresnos, tilos, cedros del Himalaya, plantas exóticas como palmeras , nísperos, bambúes y un alcornoque centenario.