Nacido en 1999 dentro de los Museos Provinciales de Gorizia, el Museo de la Moda y las Artes Aplicadas representa una de las pocas instituciones museísticas italianas dedicadas orgánicamente a la historia de los textiles y el vestuario.
El itinerario expositivo, que discurre entre las casas Dornberg, Tasso y Formentini, se abre con una sección dedicada a la producción, transformación y tejido de la seda, actividades que en la zona de Gorizia, parte del Imperio Habsburgo hasta 1918, eran de gran importancia. especialmente en el siglo XVIII, gracias al impulso dado por los emperadores María Teresa y José II. Se confeccionaban tejidos de seda sencillos y de excelente calidad, como tafetanes y gros de Tours, pero también pequeños trabajos y espléndidos damascos. El relato de esta página de la historia está confiado a muestras y maquinarias textiles, entre las que destaca una monumental máquina circular de torsión de seda que data de mediados del siglo XVIII.

Con motivo del vigésimo aniversario del Museo, se inauguró una nueva exposición con una selección de las colecciones basada en tres hilos conductores: rayas, cuadros y flores. Tres patrones que atraviesan la historia del traje, cambiando connotaciones y significados incluso de forma radical.

Entre los siglos XVIII y XX son motivos decorativos muy apreciados, que colorean la ropa (¡y los accesorios!) de hombres, mujeres y niños con diferentes grados de (in)formalidad. Los bocetos de moda y los objetos multifacéticos lo atestiguan. Empezamos con muestras de tejidos (seda, naturalmente) y pasamos a ropa, bisutería, encajes, sombreros, pañuelos bordados, bolsos y sombrillas. Una instalación multimedia interactiva permite al visitante probar suerte en el diseño textil, creando las más variadas combinaciones a su gusto.

La parte central de la exposición muestra prendas con tejidos de rayas y cuadros, que datan del siglo XVIII hasta principios del XX. Entre los más espectaculares se encuentran los vestidos de mujer de mediados del siglo XIX, pensados para lucir con grandes crinolinas. Otra instalación multimedia lleva al visitante a un viaje a través de la historia del traje, entre interiores domésticos, jardines y teatros.

La última parte del recorrido es una secuencia de situaciones inspiradas en el tema de la flor. Van desde la ropa masculina del siglo XVIII, más floreada que un herbario, hasta la sombrilla de los años veinte. Entre los vestidos de mujer destacan los diseñados por Maria Monaci Gallenga, con flores inspiradas en tejidos renacentistas, pero un desfile de vestidos del siglo XX deja claro lo popular que fue el tema floral a lo largo del siglo. El recorrido finaliza con una lluvia de flores que crea atmósferas de pura poesía.

El Museo está gestionado por la Región Friuli Venezia Giulia a través del ERPAC - Organismo Regional del Patrimonio Cultural.