La Fundación Querini Stampalia , en colaboración con White Cube, invitó al artista danés-vietnamita Danh Vo a comisariar, junto con Chiara Bertola, responsable del programa de arte contemporáneo de la institución, un proyecto expositivo con motivo de la Bienal de Venecia de este año. Sus obras, junto con las del escultor estadounidense de origen japonés Isamu Noguchi y el pintor coreano Park Seo-Bo , establecen un complejo diálogo entre ellos dentro de los espacios de este extraordinario edificio.

La historia de la Fundación Querini Stampalia es también la de la noble familia veneciana, los Querini, que vivieron en este edificio durante generaciones, acumulando una vasta colección de objetos, libros y obras de arte. Esta colección se pone a disposición de todos con la fundación de la Fundación en 1869. El complejo trazado arquitectónico abre continuas ventanas en el tiempo. Cada piso señala una nueva era en la que los diferentes momentos de la historia de la familia y de la institución se han registrado, superpuesto o cancelado. El espacio, audaz y humilde a la vez, es una experiencia laberíntica que muestra las redundancias, excesos, superposiciones, con gestos mínimos o grandiosos, de las generaciones que se han sucedido.

¿Quién mejor que Danh Vo podría cruzar ese umbral? Como artista, Vo es capaz de hacer germinar nueva vida desde la niebla de la memoria y el peso de la historia. Su trabajo con objetos y espacios arquitectónicos revela una sensibilidad hacia el tiempo como elemento conectado con cada uno de nosotros. Vo reutiliza constantemente su trabajo, colocando proyectos pasados en nuevos entornos y significados y alterando la percepción del visitante. El arte de Vo, junto con la historia, se inscribe en distintos espacios y culturas, creando una danza difícil con belleza y poder.